¿Cómo mantener una actitud positiva durante una mudanza?

En Mudanzas Galicia Express, después de tantos años de experiencia en el sector, sabemos que las mudanzas agradables no son. Es por esto que cuidar nuestra mentalidad es uno de los pasos más importantes para que todo salga bien.

A continuación, discutiremos algunos puntos importantes que nos ayudaran a mantener un buen estado mental para lograr afrontar con éxito cada desafío.

Reconoce y acepta los desafíos emocionales de la mudanza.

Comprende que es normal sentir estrés o ansiedad durante el proceso de mudanza.

El llevar a cabo una mudanza no es un proceso fácil. Muchas veces significa abandonar un hogar, el cual significa mucho para nosotros o en el que hemos vivido durante muchísimo tiempo. Por esta razón, la resiliencia durante la mudanza es muy importante.

Acepta los altibajos emocionales y permítete sentir y expresar tus emociones.

Como ya hemos mencionado, las mudanzas generan mucho estrés; son muchas cosas la que debemos tener en cuenta tanto a la hora de planificarla como de llevarla a cabo y por mejor organización que tengamos, pueden ocurrir eventualidades que compliquen las cosas. Esto nos hará sentir impotentes y ansiosos; es normal. Lo mejor es enfrentar el cambio con una mentalidad positiva.

Establece expectativas realistas y recuerda que la adaptación lleva tiempo.

Mudarse no es un proceso sencillo, muchas veces implica dejar atrás un pasado al cual podemos estar muy apegados.

Esto no significa que debemos olvidarlo todo de la noche a la mañana. Está bien pasar por un pequeño periodo de tiempo en donde la nostalgia esté presente en nuestra vida y nos haga querer regresar. Los cambios, en especial los de una magnitud tan grande, necesitan tiempo para ser asimilados. Es de vital importancia que poco a poco lidiemos con nuestras emociones.

Enfócate en los aspectos positivos del cambio

Identifica las oportunidades y beneficios que trae consigo la mudanza.

Es muy común que, en el proceso de mudarnos, debido al estrés inevitable que esto supone, nos enfoquemos únicamente en lo negativo. Incluso podremos llegar a magnificar cosas que, realmente, son una tontería. Lo ideal es que nos enfoquemos en las oportunidades que tendremos en el futuro, en todo lo que podremos hacer una vez haya finalizado la mudanza.

Visualiza tu nuevo hogar y las experiencias emocionantes que te esperan.

Empezar de cero en un nuevo hogar puede ser una experiencia complicada. Nuestra antigua casa puede tener recuerdos muy importantes para nosotros, por lo que debemos tomar las cosas con calma.

Lo mejor que podemos hacer es pensar que, nueva casa, nuevas oportunidades. El cambiar de ambiente siempre es una buena excusa para cambiar de hábitos y darle un nuevo aire a nuestra vida.

Aprecia las nuevas amistades, vecindario o entorno que descubrirás.

A pesar de que sea duro al principio, debemos considerar todas las posibilidades que nuestra nueva vivienda puede ofrecernos. Una cosa positiva que podemos encontrar es que nos encontraremos con nuevos vecinos. Nunca se sabe la cantidad de amistades que podremos forjar cuando nos mudamos a un sitio nuevo.

Crea un plan y mantén la organización.

Establece metas y objetivos claros para cada etapa de la mudanza.

Las mudanzas, si se llevan a cabo de forma correcta, pueden tardar un tiempo considerable. Esto hace que sea apropiado organizarnos y establecer que cosas son importantes para cada etapa. Consultar las empresas pertinentes, los precios de los vehículos, una fecha que nos beneficie, tener todo almacenado, los servicios pagos en el nuevo hogar, etc.

Son muchas cosas, y lo mejor es tener una lista e ir poco a poco asegurándonos de que todo se vaya haciendo de la mejor forma posible.

Organiza tus pertenencias y haz una lista de tareas para mantenerte enfocado.

Es normal que, a raíz del estrés que genere la mudanza, nos olvidemos de otras responsabilidades (estén relacionadas con el cambio de hogar o no). Esto hace que, para evitar futuros malos ratos, lo mejor sea que acudamos a organizar muy bien las tareas de nuestro día a día; podremos evitar que algo importante se nos pase por alto y termine generando mucho más estrés.

Celebra cada logro y avance en tu plan de mudanza para mantener la motivación.

Es normal que nos encontremos con piedras en el camino. Por mejor organización que hagamos, hay muchos factores que se salen de nuestro control, esto hace que sea importante celebrar cada uno de los avances en relación con nuestra mudanza. Esto es algo que es especialmente bueno para mantener nuestro buen ánimo y lidiar mejor con cualquier problema que se pueda presentar.

Busca apoyo emocional y práctico.

Comunícate con amigos y familiares para obtener apoyo y compartir tus sentimientos.

Los amigos y familiares no solo pueden ser una fuente de apoyo emocional durante una mudanza.

También pueden ayudarnos a desahogarnos a lo largo de todo el largo proceso que supone una mudanza. A veces, ser escuchados un momento es todo lo que necesitamos para seguir adelante.

Busca grupos o comunidades en línea de personas que están pasando por una mudanza.

Si nos sentimos muy abrumados, siempre podemos acudir a las redes sociales. Aquí encontraremos personas que estén pasando o hayan pasado por situaciones similares a las nuestras con las que podremos conversar y nos podrán hacer sentir mejor.

Pide ayuda práctica a seres queridos o considera contratar servicios profesionales para aliviar la carga.

El movilizar todas las cosas que tenemos en nuestra antigua vivienda puede ser una tarea muy complicada; sobre todo si tenemos muchos objetos.

Encontrar motivación durante la mudanza puede ser complicado, por lo que podemos recurrir a amigos para que nos hagan sentir mucho mejor.

Practica técnicas de manejo del estrés y autocuidado.

Dedica tiempo para relajarte y realizar actividades que te brinden placer y calma.

El manejo del estrés durante la mudanza es fundamental. Es bueno que nos relajemos y, para esto, lo mejor es llevar actividades al aire libre o compartir con amigos. De esta forma podremos liberar nuestra mente de un gran estrés acumulado.

Practica técnicas de respiración, meditación o yoga para reducir el estrés.

Tener buenas técnicas de relajación durante el proceso de mudanza nos ayudará a que nuestra mente y cuerpo se encuentren mejor y más preparados para llevar a cabo todo el proceso.

Mantén una rutina de sueño adecuada y cuida tu salud física y mental durante la mudanza.

Una de las mejores estrategias de autocuidado durante la mudanza es tener un buen periodo de sueño, pues nos permitirá tener la energía suficiente para superar cada inconveniente.

Celebra los hitos y pequeños logros.

Reconoce y celebra cada paso adelante en el proceso de mudanza.

¿Hemos completado un paso más para poner fin a la mudanza? Lo mejor que podemos hacer enorgullecernos de ello. Celebrar los logros durante el proceso de mudanza nos hará sentir mucho mejor.

Recompénsate con pequeñas indulgencias o actividades divertidas después de completar tareas.

Quizás un postre que nos haga la boca agua o una salida a un sitio muy especial pueden ser formas de llevar el tema de la mudanza y no caer en un estrés constante.

Mantén una actitud de gratitud y apreciación por los avances realizados.

El pesimismo en nuestro peor enemigo, por esta razón, aceptar y adaptarse a los desafíos emocionales de la mudanza es una forma muy sana para seguir avanzado. Al mismo tiempo, mantener una actitud de gratitud durante la mudanza nos permitirá hacer todo el trabajo de una mejor manera.